Otros proyectos

domingo, 27 de julio de 2025

El día que la envidia corroyó a un admirador de Dafne Blake

 Hoy vamos a empezar un experimento que va de la mano a las historias que hemos planteado, y me voy a meter con una de mis Crush de la infancia, Dafne Blake, del universo de Scooby Doo

Para esto lo haremos estilo Conversación con algunas partes narrativas, nunca había escrito algo así pero espero les guste y me apoyen con sus comentarios y si quieren compartir yo feliz

Así que vamos a comenzar con esta historia de Bodyswap llamada El día que la envidia corroyó a un admirador de Dafne Blake

Dafne en Rosa

Alejandro en Azul


El Primer Encuentro Universitario

Dafne: El bullicio de la universidad era ensordecedor, pero aún así, la energía era emocionante. Estaba ajustándome mi bufanda de seda favorita mientras buscaba un lugar en el abarrotado campus. El sol de la tarde se filtraba entre los árboles, dándole un brillo especial a mi cabello. De repente, sentí un ligero empujón.

"¡Oh, lo siento muchísimo!" dije, volteándome y encontrándome con un chico que estaba recogiendo unos libros que se le habían caído. "Estaba tan distraída, ¡lo lamento de verdad!"


Le tendí una mano para ayudarlo. "Soy Dafne, por cierto. ¿Necesitas ayuda con eso?"

Gracias Dafne yo soy Alejandro, estudiante de leyes, te he visto por aquí. Gracias por la ayuda

"¡Alejandro! Encantada de conocerte. ¿Estudiante de leyes, dices? ¡Qué interesante! Yo estoy en periodismo, aunque a veces me pregunto si no debería haber estudiado algo más... ¡glamuroso! Jajaja. Es un placer conocer a alguien con tanta dedicación. ¿Ya te has acostumbrado al campus?"

Si, es bastante grande y aun me pierdo, y tu ? Vas a clases? Yo tengo una hora libre y si tienes tiempo podríamos almorzar

"¡Ay, sí! ¡Absolutamente! Justo tengo un hueco antes de mi clase de investigación periodística. Me vendría genial un descanso y, la verdad, aún me pierdo un poco en este laberinto de edificios. ¡Sería genial almorzar contigo, Alejandro! ¿Conoces algún buen sitio por aquí o deberíamos aventurarnos a explorar?"

Pues creo que vamos a explorar, he escuchado que cerca de la facultad de arquitectura hay unos desayunos fenomenales

"¡Desayunos fenomenales, dices! ¡Eso suena perfecto, Alejandro! Me encanta probar sitios nuevos. ¡Vamos a la aventura entonces! Espero que tengan algo con mucha fruta y un buen café." ¡Mira! Encontré algunos lugares cerca de la facultad de arquitectura. "Terraza Allende" suena bien, tiene buena calificación y está a unos 850 metros. También está el "Restaurante Casa Club del Académico" un poco más lejos, pero con una calificación aún mejor.

¿Cuál te apetece más? O si quieres, podemos caminar y ver cuál nos llama más la atención.

¡Estoy emocionada por probar esos desayunos!

¿A cual vamos?

Al que te agrade más. Estoy en tus manos

"¡Perfecto! Entonces, ¿qué te parece si vamos a Terraza Allende? Está un poco más cerca y tiene muy buenas reseñas. ¡Seguro que encontramos algo delicioso para empezar el día con energía! ¿Nos ponemos en marcha?"

Vamos

Creo que no nos tardaremos nada, creo que estamos a unos 500 metros

¡Oh, tienes toda la razón, Alejandro! ¡Mil disculpas! Parece que mi sentido de la orientación digital está un poco despistado hoy. Tienes razón, si estamos en la explanada de la universidad, debería estar a solo unos metros.

¡Vamos a ver si con una ubicación más específica de la universidad podemos encontrar el camino a Terraza Allende. ¡A ver si así funciona! ¡Ahora sí! ¡Esto tiene mucho más sentido!

Estamos a solo 400 metros de Terraza Allende, y nos tomará unos 5 minutos caminando desde la Universidad Nacional Autónoma de México. ¡Perfecto para un almuerzo!

"¡Listo, Alejandro! Parece que mi sentido de la orientación está de vuelta. ¡Está a solo 5 minutos a pie! ¡Vamos, seguro que ya me está dando hambre!"



Dafne eres una chica encantadora, nos acabamos de conocer y siento que te conozco de hace años. (Lo que Dafne no sabe es que Alejandro la ha estado observando ya hace mucho tiempo, meses quizá)

"¡Ay, Alejandro, eres tan dulce! Me pasa exactamente lo mismo. Es curioso, ¿verdad? A veces conectas con alguien al instante, como si sus almas ya se conocieran. ¡Me alegra mucho que te sientas así! Ya me estaba gustando nuestra conversación. Es genial conocer a alguien tan... ¿Cómo decirlo? ¡Tan agradable y fácil de hablar!"

Mientras caminan hacia Terraza Allende, Dafne sonríe, ajena a la mirada un poco más intensa de Alejandro, quien disimuladamente la observa, como si estuviera grabando cada detalle de su sonrisa y sus gestos.

Dafne te tengo qué confesar algo. He oído algunas cosas de ti. Porque eres famosa... sé que investigas misterios con Algunos chicos y un perro ¿me puedes contar?

"¡Oh, vaya! ¿Así que mi 'fama' me precede, ¿eh? Jajaja. Bueno, supongo que es difícil mantener un perfil bajo cuando te encuentras con tantos... misterios por ahí. Sí, es verdad, tengo un grupo de amigos muy peculiar y un perro increíblemente inteligente, ¡Scooby! Juntos, nos encanta resolver enigmas.

Es una locura, ¿sabes? Un día estás en clase y al siguiente te encuentras desenmascarando a un fantasma en una mansión abandonada. Siempre hay algo emocionante sucediendo. Supongo que es mi lado periodístico que me impulsa a buscar la verdad, ¡aunque a veces la verdad sea un poco... espeluznante!

Pero dime, ¿cómo te enteraste de eso? ¿Soy tan famosa como para que mis 'aventuras' se cuenten por los pasillos de la universidad?"

Chica me sorprende que no sepas que eres famosa, pero la verdad es que solo he oído rumores. Solo eso, pero que mejor saber las cosas de la fuente. Verdad señorita periodista.

"¡Jajaja! ¡Señorita periodista, me gusta eso! Tienes razón, siempre es mejor ir a la fuente, ¿no crees? Y sí, supongo que es un poco difícil mantenerlo en secreto cuando te encuentras con fantasmas y monstruos... o al menos, gente disfrazada de ellos.

Es que, mira, no es que busquemos problemas, ¡es que los problemas nos encuentran a nosotros! Siempre estamos en el lugar y el momento equivocados... o quizás, en el lugar y el momento justo para desenmascarar algo.



Pero cuéntame, Alejandro, ¿qué tipo de rumores has oído? ¿Soy la chica que siempre se mete en líos, o la que siempre tiene el mejor atuendo para cada misterio?" Dafne guiña un ojo, con una sonrisa juguetona. "Porque, si soy sincera, a veces es un poco de las dos cosas."

Pues que te diré. Eso solo lo podre saber si tu me permites seguir siendo amigo tuyo. además creo que tienes un novio. O eso parece. Un chico que se llama Alfredo o algo así 

"¡Por supuesto, Alejandro! ¡Me encantaría que fuéramos amigos! Siento que hemos conectado muy bien. Además, ¡quién sabe cuántos misterios te puedas encontrar a mi lado! Jajaja.

Y sobre lo del novio... ¿Alfredo? ¡Ay, me has hecho reír! Te refieres a Fred, ¿verdad? Fred es... bueno, es mi compañero principal en esto de resolver misterios. Siempre es el que está ideando las trampas más elaboradas. Somos muy, muy buenos amigos y trabajamos increíblemente bien juntos. Digamos que es mi 'socio en el crimen'... ¡pero en el buen sentido, claro! Nos complementamos mucho.

Así que, no te preocupes por eso. Mi círculo de amigos es muy abierto. ¡Estoy segura de que te llevarías genial con todos ellos!

Entonces, ¿listo para más "rumores" de primera mano?"

Si, ¡me encantaría!. Me gusta saber sobre ti y tu emocionante vida.

"¡Me alegra muchísimo, Alejandro! Es que mi vida es un poco... inusual, por decirlo suavemente. Nunca sabes cuándo te vas a encontrar con un villano disfrazado o un misterio que resolver.

Por ejemplo, la semana pasada, estábamos en un viejo parque de atracciones abandonado. Se suponía que estaba embrujado por el fantasma de un payaso. ¡Imagínate! Fred estaba obsesionado con las trampas, Vilma con las pistas, Shaggy y Scooby solo pensaban en la comida, y yo... bueno, yo intentaba mantener la calma y asegurarme de que nadie se lastimara mientras buscaba el ángulo perfecto para mi reportaje. Al final, resultó ser el dueño del parque, que quería asustar a la gente para comprar el terreno barato. ¡Siempre es lo mismo!


Pero es emocionante, ¿sabes? Hay una adrenalina que no se compara con nada. Y lo mejor es que siempre aprendes algo nuevo. ¿Tú qué haces para mantener tu vida emocionante, Alejandro? ¿Las leyes tienen sus propios misterios?"

(Alejandro estaba fascinado y cada vez sentía más envidia de lo que Dafne le contaba, pero lo disimula muy bien) Es increíble Dafne me has dejado con la Boca abierta, no entiendo cómo te pasan estas cosas

"¡Jajaja! Te lo juro, a veces ni yo misma lo entiendo, Alejandro. Pero supongo que la vida es así, ¿no? Siempre hay algo inesperado a la vuelta de la esquina. Lo importante es estar preparado... ¡y tener un buen atuendo para cada ocasión, claro!" Dafne guiña un ojo, riendo suavemente.

"Pero hablando en serio, es una locura. Una semana estamos en un pantano buscando un monstruo de lodo, y a la siguiente, en una feria campestre con un duende. Es como si el universo tuviera un radar para nosotros. Y por eso mismo, siento que tengo que estar lista para cualquier cosa, siempre con una mente abierta y el ojo puesto en los detalles."

Dafne mira a Alejandro, que parece genuinamente cautivado por sus historias. "Pero me alegra que te parezca emocionante. A veces pienso que la gente no me cree cuando cuento estas cosas."

Bueno yo no soy así, no tengo por qué no creerte. Y si te lo estuvieras inventado no me importaría, me encanta tu forma de narrar las cosas. Seguro serás una gran reportera

"¡Ay, Alejandro, eres un sol! Gracias por decir eso. Significa mucho, de verdad. A veces es difícil encontrar gente que entienda... o que al menos no te mire raro cuando hablas de fantasmas y máscaras. ¡Y me alegra que te guste cómo narro! Es mi pasión, contar historias, así que espero de verdad convertirme en una gran reportera algún día. ¡Con tu apoyo, seguro que sí!"

Dafne le sonríe cálidamente mientras continúan caminando, el sol de la mañana iluminando su cabello. Se siente genuinamente a gusto con Alejandro, ajena por completo a la compleja trama que él está tejiendo en su mente.

Dafne y Alejandro se despiden y el sigue fascinado con ella, Alejandro al terminar las clases se va al Mercado de Sonora, dónde hace tan solo una semana encontró a un brujo que le garantizada cumplir su sueño, el cambiar vidas con la chica de sus sueños.

Al llegar al puesto del brujo le dijo que si había conseguido todo a lo que Alejandro contesto que sí. El cabello de Dafne, algún fluido qué obtuvo cuándo ella se sonó la nariz en una servilleta y algo personal que había sido algo que le saco de su bolsa cuando fue al baño, asi que el Brujo le dijo que la pócima estarías en poco mas de un mes


 

Alejandro y Dafne empezaron a ir a almorzar mas seguido, a Dafne le gustaba los lugares que le recomendaba y eso la hacía feliz

"¡Bueno, Alejandro, fue un placer enorme almorzar contigo! Me divertí mucho. ¡Nos vemos por aquí en la universidad! ¡Y no te olvides de esos rumores, eh!" Dafne se despidió con una sonrisa radiante y un pequeño saludo con la mano, girándose para ir a su siguiente clase.

Alejandro la observó alejarse, una sonrisa lenta y un tanto escalofriante se extendía por su rostro. La fascinación en sus ojos era casi palpable. "Oh, no te preocupes, Dafne," murmuró para sí mismo, "no me olvidaré de nada."

Un mes después una vez mas La Visita al Mercado de Sonora

Ese día las clases de la tarde pasaron en un borrón para Alejandro. Su mente estaba fija en un solo objetivo. En cuanto el último profesor lo liberó, se dirigió directamente al caótico y vibrante Mercado de Sonora. El olor a hierbas, inciensos y animales exóticos llenaba el aire, un contraste total con el pulcro campus universitario.

Navegó entre los estrechos pasillos con un propósito definido, hasta que llegó al puesto apartado del brujo que había encontrado la semana anterior. El anciano, con sus ojos penetrantes y su barba canosa, lo esperaba.

"¿Lo conseguiste todo, muchacho?" preguntó el brujo con una voz rasposa, sin rodeos.

Alejandro asintió, su corazón latiendo con fuerza. "Sí, aquí está. El cabello de Dafne," dijo, sacando un pequeño mechón dorado cuidadosamente envuelto en un pañuelo. "También conseguí... un fluido," añadió con una mueca de asco apenas perceptible, recordando el momento en que Dafne se había sonado la nariz en una servilleta y él la había guardado. "Y esto," concluyó, mostrando un pequeño y brillante broche que había deslizado de la bolsa de Dafne cuando ella fue al baño en el restaurante. Era un broche sencillo, pero muy del estilo de Dafne.

El brujo examinó los objetos con una mirada crítica, casi perversa. Los frotó entre sus dedos, olisqueó el cabello. "Excelente, excelente," musitó. "Esto es suficiente. La pócima estará lista en poco más de un mes. Vuelve entonces, y tu deseo... será concedido."

Una sonrisa triunfante se dibujó en el rostro de Alejandro. La espera sería larga, pero la promesa de la vida de Dafne, de su "fama", de su encanto, lo valía todo.

Alejandro seguía observando a Dafne y se topaba con ella en momentos precisos. Como el de hoy.

Hola Dafne, que casualidad, estaba a punto de ir a desayunar y como vi que tiene la hora libre te quiero invitar. Vamos al comedor de la facultad de Economía, se desayuna rico y es barato

"¡Alejandro! ¡Qué buena suerte encontrarte! ¡Justo estaba pensando qué hacer con esta hora libre! Desayunar suena perfecto, y si es rico y barato, ¡mucho mejor! Me encanta descubrir los buenos lugares del campus.

"¡Claro que sí, vamos al comedor de Economía! ¡Me muero de hambre! ¿Qué tal tu día hasta ahora? ¿Algún misterio legal que resolver?" Dafne sonríe, ajustándose su bolso al hombro y lista para seguir a Alejandro.

Fíjate que sí. Estamos discutiendo lo de la elección de jueces y magistrados para ver los pros y los contras, pero seguro que eso te aburre

"¡Para nada, Alejandro! ¡Al contrario! ¡Me parece fascinante! Como futura periodista, me interesa mucho cómo funcionan esas cosas, cómo se eligen a las personas que toman decisiones tan importantes. Suena como un verdadero... ¡misterio político! Jajaja.

Pero cuéntame, ¿cuáles son los principales puntos de discusión? ¿Hay mucho debate sobre ello? Me intriga saber la perspectiva de un estudiante de leyes."

Dafne lo mira con genuina curiosidad, su expresión abierta y atenta, lista para absorber la información.

Pues para ser sincero, esto que el Gobierno hizo no va a traer nada bueno a largo plazo. Pero el problema no es sencillo, pues con la ley mordaza o como así llaman a la de comunicaciones y la elección de jueces no vamos a saber cuándo hagan bien su trabajo. Ojalá que tu puedas desenmascarar a lo que sean malos servidores públicos. Pero también espero que si lo haces no te vayan a pedir que te disculpes por violencia o cosas así.

"¡Uf, eso suena a un problema gordo, Alejandro! Y tienes razón, es justo el tipo de cosas que me encienden la chispa de 'misterio a resolver'. La ley mordaza... eso suena bastante preocupante para la libertad de información y para saber si los jueces están haciendo lo correcto. ¡Imagínate no poder investigar o reportar sobre algo así!

Entiendo tu preocupación. Es frustrante sentir que la verdad podría quedar oculta. Y sí, es un riesgo. A veces, cuando desenmascaras a alguien, no siempre les gusta, y menos si son... servidores públicos que no están haciendo bien su trabajo. Lo de pedir disculpas por 'violencia' cuando solo buscas la verdad es una locura, ¿no crees? Pero como Abogado, siento que es mi deber sacar esas cosas a la luz, sin importar lo difícil que sea.

¡Gracias por confiar en mí para contármelo! Es algo que definitivamente me hace pensar. ¿Crees que hay alguna manera de que los ciudadanos puedan presionar para que haya más transparencia?"

Por ahora es difícil, pero gente como tu será vital para defendernos. Pero ahora cuenta me tú... ¿es verdad que vas a modelar para una revista de jóvenes.?

"¡Ay, Alejandro! ¡Me encanta que estés tan al tanto de los chismes universitarios! Jajaja. Pues sí, es verdad que ha habido algunas conversaciones al respecto. Una revista de moda juvenil se puso en contacto conmigo. Les gustó mi... 'estilo único', supongo.

Todavía no es algo seguro, pero estoy emocionada con la idea. Sería una experiencia completamente diferente a lo que estoy acostumbrada, ¡pero me encanta probar cosas nuevas! Además, podría ser una buena oportunidad para mostrar que no todo en la vida es resolver misterios con fantasmas.

¿Tú crees que tengo lo que se necesita para ser modelo? ¡Sería un giro interesante en mi carrera de periodista!" Dafne sonríe, un poco ruborizada pero con un brillo en los ojos.

Pues tu estilo me encanta, tienes la altura y el cuerpo para ser modelo. Solo que los nervios no te traicionen, si YO FUERA TU no dejaba escapar la oportunidad

"¡Ay, Alejandro, eres tan alentador! Me haces sentir que puedo conquistar el mundo, ¡de verdad! Tienes razón, no debería dejar que los nervios me jueguen una mala pasada. Si tú fueras yo, irías con todo, ¿eh? ¡Me gusta esa actitud!

Sí, supongo que tengo la altura... y el cuerpo, como dices. ¡Jajaja! Aunque a veces correr de fantasmas es mi principal rutina de ejercicios. Pero en serio, tus palabras me dan un empujón. ¡Gracias! ¡Definitivamente voy a intentarlo con todo mi empeño!"


Dafne y Alejandro terminaron su desayuno, con Dafne charlando animadamente sobre sus clases y algunos planes para el fin de semana, completamente ajena a la mirada fija y calculada de Alejandro. Él, por su parte, asentía, sonreía y hacía comentarios ocasionales, pero su mente estaba en otra parte, repitiendo las palabras "si yo fuera tú". Cada halago, cada sugerencia que le hacía a Dafne, era una pieza más en el rompecabezas de su propio deseo. La pócima estaba en camino, y la oportunidad de ser Dafne Blake, la chica popular y aventurera, se acercaba más con cada día que pasaba.

La Pócima y sus Instrucciones

El aire en el Mercado de Sonora era denso y misterioso, como siempre, pero esta vez Alejandro no sentía la misma emoción infantil de sus visitas anteriores. Había transcurrido más de un mes desde su último encuentro con el brujo, y la anticipación había crecido hasta convertirse en una certeza helada. El día de la Luna Llena se acercaba.

Llegó al puesto del brujo, quien lo recibió con una sonrisa enigmática. Sin decir palabra, el anciano le tendió una pequeña botella de cristal oscuro, llena de un líquido que parecía agua pura.

"Aquí lo tienes, muchacho," dijo el brujo con su voz rasposa, sus ojos fijos en Alejandro. "Las instrucciones son simples, pero cruciales. Escucha bien:"


 
  1. "Este líquido es incoloro e insípido. Podrás ponerlo en la bebida de la chica sin que se dé cuenta. Pero el ritual solo funcionará bajo la luz de la próxima luna llena."
  2. "Tú también deberás tomar una pequeña cantidad de esta pócima. Ponla en tu propia bebida, al mismo tiempo que ella."
  3. "Una vez que ambos la hayan ingerido, deberás besar a la chica. No importa si se enoja o si le gusta el beso. El proceso de cambio de almas no se completará hasta la luna nueva."
  4. "Una vez hecho esto, deberás regresar aquí antes de la luna nueva para hacer el pago. El precio, como ya sabes, es la entrega de tu propia alma."
  5. "Recuerda, muchacho, yo no te obligo a nada. Si no quieres proceder, puedes olvidar la pócima y no hacer nada. Su caducidad es de 30 días. Después de eso, no volverás a tener otra oportunidad en la vida para este propósito."

Alejandro sintió un escalofrío que le recorrió la espalda, pero la determinación en sus ojos era inquebrantable. Tomó la botella con manos firmes. "Entendido," dijo, su voz apenas un susurro. La promesa de la vida de Dafne era demasiado tentadora para retroceder ahora.

La Invitación

Con la pócima segura en su bolsillo, Alejandro no perdió el tiempo. Sacó su teléfono y marcó.

"¿Dafne? Hola. Soy Alejandro. Oye, me preguntaba si estarías libre para cenar una de estas noches. Hay un restaurante nuevo que me encantaría probar... “ Su voz sonaba casual, pero por dentro, el nerviosismo y la emoción burbujeaban.

Dafne aceptó sin ducarlo mucho, ya le había tomado confianza a Alejandro.

Ese fin de semana que había Luna llena se vieron en un restaurante de San Ángel que sugirió Alejandro y al verla lo primero que dijo fue:

DAFNE te ves espectacular, nunca te había visto tan hermosa. Gracia por aceptar mi invitación




La Cena de Luna Llena

La luna llena brillaba redonda y plateada en el cielo de San Ángel, bañando las calles empedradas con una luz casi mágica. Dafne llegó al restaurante, con un vestido elegante que realzaba su figura y su cabello suelto, brillando bajo la luz nocturna. Al ver a Alejandro, una sonrisa cálida iluminó su rostro.

"¡Hola, Alejandro! ¡Tú sí que sabes cómo hacer que una chica se sienta especial! Gracias, tú también te ves muy bien esta noche," respondió Dafne, sus ojos azules brillando de alegría. "¡Gracias a ti por invitarme! Este lugar es precioso. Me encanta el ambiente. ¿Qué tal tu día?"

Se sentaron en una mesa acogedora, con la vista perfecta de la luna. Dafne, ajena a los nervios apenas contenidos de Alejandro, miraba la carta con entusiasmo. Y ella le pregunto por su día

¿Mi dia? ¡bien!, pero la verdad he estado algo nervioso por la cita, espero llene tus expectativas, y la pases bien. Nuestra reservación es a las 9 pm y pensé qué podíamos caminar un poco tenemos 15 minutos. La luna esta magnífica esta noche.

"¡Ay, Alejandro, eres tan dulce! No tenías por qué estar nervioso, ¡estoy segura de que la pasaremos genial! Y sí, la luna está absolutamente magnífica esta noche. ¡Parece una joya gigante en el cielo!

"Caminar un poco suena perfecto. Siempre me encanta estirar las piernas antes de una buena cena. ¡Además, así podemos disfrutar de esta vista tan bonita! ¿Qué te parece si damos una vuelta por aquí? ¡San Ángel es tan pintoresco de noche!" Dafne se levanta con gracia, lista para seguirlo, con una sonrisa genuina.

"Alejandro piensa: todo eso debe ser mío, hoy se ve como quiero lucir en el futuro "

¿No tienes frio? Te puedo prestar mi abrigo

"¡Ay, qué lindo eres, Alejandro! ¡Muchas gracias! La verdad es que no, no tengo nada de frío, este vestido es más abrigador de lo que parece. Además, ¡el ambiente de San Ángel es tan cálido esta noche!"

Dafne le sonríe, agradecida por el gesto, pero sin atisbo de sospecha en su mirada. Su atención se centra en la belleza de la luna llena y el encanto del lugar.

Mira que el tiempo ha pasado demasiado rápido. Vamos a ver si nuestra mesa esta lista. Escogí el mejor lugar del Restaurante cerca de escenario. Un cuarteto de violines estará amenizando la noche.


El Comienzo de la Noche

"¡Vaya que sí! ¡El tiempo vuela cuando la conversación es buena!" Dafne exclama con su habitual entusiasmo, asintiendo con la cabeza mientras se dirigen de nuevo hacia la entrada del restaurante.

"¡Un cuarteto de violines! ¡Alejandro, eres increíble! Eso suena absolutamente mágico. Sabes que me encanta la música, y los violines le dan un toque tan... romántico a la noche. ¡Escogiste el lugar perfecto!"

Sus ojos brillan con anticipación mientras se acercan a la entrada, ajena por completo a la verdadera intención detrás de la elección del escenario. Se imagina ya la velada, llena de música y buena compañía, sin sospechar el drama que está a punto de desatarse bajo la luz de la luna llena.

Mira en menú, yo te recomiendo la crema de espárragos y de plato fuerte si te gusta la carne el chateaubriand, si eres vegana hay varias ensaladas que te pueden interesar

"¡Ay, Alejandro, eres un experto en esto! ¡Gracias por las recomendaciones!" Dafne toma el menú y sus ojos recorren las opciones. "Mmm, crema de espárragos suena delicioso, y el chateaubriand... ¡se ve tentador! Soy bastante aventurera con la comida, así que me encanta la carne. ¡Definitivamente lo consideraré! Aunque también las ensaladas se ven muy frescas.

"¿Tú qué vas a pedir? ¿Ya eres un habitual de este lugar o es tu primera vez aquí?"

Es mi primera vez, pero leí muchas reseñas, ya que quería estar preparado para nuestra venida, yo voy a pedir la crema de espárragos y de plato fuerte un osobuco. Me tome la libertad de pedir un vino francés tinto, pero si quieres otra cosa para beber estaría bien

"¡Vaya, Alejandro! ¡Te tomaste esto muy en serio! Me encanta que hayas investigado tanto para nuestra cena," Dafne sonríe, impresionada por su atención al detalle. "La crema de espárragos suena increíble, y el osobuco... ¡uff, qué delicia! ¡Tienes muy buen gusto!

"¿Un vino francés tinto? ¡Perfecto! Me encanta el vino tinto, así que no te preocupes, ¡es una elección excelente! Gracias por pensar en todo. ¡Esto promete ser una noche maravillosa!"

Dafne se recuesta ligeramente en su silla, su mirada recorriendo el elegante salón y el pequeño escenario donde el cuarteto de violines ya comenzaba a afinar sus instrumentos, llenando el aire con suaves y prometedoras melodías. Todo era perfecto... o eso parecía.

Mira han traído el vino. Lo voy a catar, aunque si tú lo quieres hacer adelante. No soy un experto, pero fui a una clase y por lo menos no haré el ridículo

"¡Oh, mira qué rápido! ¡Qué bien!" Dafne observa cómo el mesero trae la botella de vino.

"¡Para nada, Alejandro! ¡Adelante, tú eres el experto aquí! Yo solo sé si me gusta o no, ¡pero no tengo idea de si está 'balanceado' o si tiene 'notas a frutos rojos'!" Ríe suavemente, animándolo con la mirada. "Además, ¡me encanta aprender! Así que, ¡sorpréndeme con tus conocimientos de sommelier de una clase!"

Se inclina ligeramente, expectante y divertida, mientras Alejandro se prepara para catar el vino, ajena al pequeño gesto que él está a punto de realizar con la pócima.

Vaya este vino es con sabores a madera, está muy rico, así que nos lo quedaremos. La comida va a tardar un poco pues todo está hecho al momento. Que te parece si vamos un momento a la terraza, dicen que la vista es espectacular

"¡Mmm, a madera! ¡Qué interesante! ¡Me encanta que ya sepa rico, eso es lo importante! ¡Excelente elección, Alejandro!" Dafne asiente con aprobación, sintiendo ya el ambiente relajado y agradable de la noche.

"¡Oh, sí! ¡La terraza suena perfecto! Me encanta una buena vista, y con esta luna... ¡será espectacular! Además, así estiramos las piernas antes de la cena. ¡Vamos!"

Dafne se levanta con una sonrisa, lista para seguir a Alejandro, completamente ajena a lo que él tiene planeado. Sus ojos brillan con la simple alegría de la noche.



La Terraza y la Oportunidad

Dafne se asomó al balcón de la terraza, con los ojos brillando ante el panorama. La Ciudad de México se extendía bajo la luna llena, un tapiz de luces que parpadeaban en la distancia. "¡Ay, Alejandro, es espectacular! ¡Tenías toda la razón! Mira cómo brillan las luces de la ciudad bajo esta luna. ¡Es mágico!", sabes Alejandro, estoy muy contenta de haber venido hoy, la verdad nunca había hecho esto, salir con un chico que tengo tan poco tiempo de conocer, es extraño, pero agradable a la vez

Alejandro sonrió, observándola. "Sí, es... impresionante," y te agradezco la confianza dijo, su voz con un matiz diferente al habitual, casi un susurro. "Dafne, perdona, pero olvidé mi teléfono en la mesa. No tardo nada, ¿eh? Es que me van a mandar un mensaje de la oficina que debo contestar si o si. Ya sabes lo explotadores que son en el trabajo y más con los pasantes de leyes," añadió con una sonrisa forzada antes de darse la vuelta rápidamente y desaparecer de nuevo dentro del restaurante.

Dafne asintió, despreocupada. "¡Claro, no te preocupes! Aquí te espero, disfrutando de la vista," dijo, volviendo su atención al paisaje nocturno, ajena a la prisa y la tensión en los pasos de Alejandro.


Mientras tanto, Alejandro regresó a la mesa con el corazón latiéndole a mil por hora. Con un movimiento rápido y disimulado, sacó la pequeña botella de la pócima de su bolsillo. Sus ojos buscaron la botella de vino tinto que les habían servido. Con la mano temblorosa, destapó la pócima y como había dicho el brujo era incolora e insípida y vació su contenido directamente en la botella de vino. Se aseguró de que no quedaran rastros en el pequeño frasco, guardándolo de nuevo. Una sonrisa de triunfo, fría y calculada, apareció en sus labios. Así, se aseguraba de que, cuando regresaran a la mesa, ambos beberían la pócima, tal como el brujo había instruido. El primer paso crucial estaba hecho.

Dafne, ya regresé. perdón, pero por suerte ya conteste el mensaje así que nadie nos interrumpirá. Te ves hermosa a la luz de la luna


El Regreso a la Mesa

"¡Aquí estás de nuevo! ¡Me alegro que ya hayas podido contestar! Así podemos disfrutar tranquilos," Dafne sonríe, volteándose de la vista de la ciudad para recibir a Alejandro. Sus ojos, bañados por la suave luz lunar, brillan con una inocencia que contrasta con la tensión interna de Alejandro.

"¿De verdad? ¿Me veo bien a la luz de la luna?" pregunta, un ligero rubor tiñéndole las mejillas mientras juguetea con un mechón de su cabello.



"¡Gracias, Alejandro! Tú también te ves muy bien, muy misterioso bajo esta luz." Se ríe suavemente, completamente ajena a la doble intención de sus propias palabras y al plan que se está desarrollando. "Bueno, ¿vamos a sentarnos entonces? ¡Ya quiero probar esa crema de espárragos!"

Dafne sigue el camino de regreso a la mesa, su mente ya en la deliciosa cena y la agradable compañía, sin la menor idea de lo que contiene el vino que los espera.


El Primer Bocado

Alejandro escoltó a Dafne de regreso a la mesa con una sonrisa perfectamente ensayada. La luz tenue del restaurante y la música suave del cuarteto de violines creaban una atmósfera íntima, casi mágica. En un par de minutos, el mesero apareció, depositando frente a ellos dos cuencos humeantes de crema de espárragos, acompañados de cestas de pan crujiente y pequeños botes de condimentos.

"Espero que sea de tu agrado, Dafne," comenzó Alejandro, su voz un murmullo suave y confiado mientras tomaba su cuchara. Sus ojos, profundos y ahora brillantes con una anticipación apenas contenida, no se apartaron de ella. "A mí me parece deliciosa. Espero tus... comentarios de experta." Un sutil desafío, casi una invitación, flotaba en el aire, mientras la pócima, ahora mezclada con el vino, esperaba pacientemente su momento.


Dafne tomó su cuchara, el vapor aromático de la crema cosquilleando su nariz. "¡Mmm, qué pinta más buena tiene esto, Alejandro!" Exclamó con su habitual entusiasmo, ajena a la tensión que burbujeaba bajo la superficie de la tranquila cena. Llevó la primera cucharada a sus labios, saboreando lentamente.

"¡Oh, Dios mío, Alejandro! ¡Esto está... increíble!" Sus ojos se abrieron ligeramente con genuino placer. "Es tan suave, tan cremoso, y el sabor del espárrago es perfecto. ¡Definitivamente tienes razón, es deliciosa! ¿Cómo sabías de este lugar?" Su comentario era sincero, lleno de la apreciación de alguien que disfruta plenamente de los pequeños placeres de la vida, mientras la pócima se deslizaba cada vez más cerca de su copa en forma de vino tinto que había sido servido con antelación.

Eso me hace inmensamente feliz, querida Dafne. No sabes lo preocupado que estaba de que no te fuera a gustar. En realidad, me esforcé mucho para encontrar este sitio."



Alejandro tomó la botella de vino y sirvió un poco en ambas copas, la pócima ahora mezclada discretamente con el líquido rubí.

"Y ahora..." Suspiró, con una teatralidad apenas perceptible, "Vamos a hacer un brindis. Primero, por tu salud." Levantó su copa, sus ojos fijos en los de ella. "Segundo, por tu belleza." Su mirada se deslizó por el rostro de Dafne, deteniéndose un instante en sus labios. "Y tercero," añadió, su voz cargada de una promesa apenas velada, "porque este sea el principio de una bella amistad."

"¡Ay, Alejandro! ¡Eres el mejor!" Exclamó, tomando su copa con una sonrisa radiante, el corazón enternecido por sus palabras. "¡Brindo por eso y por mucho más!" Dijo, sus ojos azules brillando de emoción. Sin dudarlo, llevó la copa a sus labios y tomó un sorbo generoso del vino tinto. "¡Salud, Alejandro! ¡Por nuestra amistad!"

"¡Salud, Dafne!" Alejandro bebió también, sus ojos fijos en ella mientras la observaba tomar el vino. El primer paso de su plan estaba completado, y una euforia fría recorrió su espina dorsal.

"¡Mmm! ¡Está delicioso, Alejandro! Tienes un gusto impecable. Este vino es perfecto para la noche." Dafne saboreó el trago, su sonrisa se ensanchó. "¡Definitivamente acertaste con el lugar y con la bebida! ¡Qué buen inicio para esta 'bella amistad', ¿no crees?" Se rio suavemente, sin notar la intensidad de la mirada de Alejandro.


PODRÍA CONTINUAR SI HAY APOYO


Comentar no te cuesta mas que un minuto de tu tiempo y motivas al creador

3 comentarios:

  1. Bastante bueno, me gustó como abordas el contexto actual de México, aunque también se siente como esos videos de "X personaje abre su puesto de comida en México"
    Y rayos, lo dejaste en la mejor parte

    ResponderBorrar
  2. Definitivamente ne gusta mucho este nuevo formato, es mas perfinal con los personajes!

    A un que espero que haya mas contenido explicito

    ResponderBorrar

¿Te ha pasado que quieres decir algo pero las palabras no son suficientes? Ahora puedes colocar imágenes o vídeos en comentarios, con los siguientes códigos:

[img]URL de la imagen[/img]

[video]URL del video[/video]